¿Es moral la naturaleza? Pepe Hurtado
Resumen: El presente
artículo expone la tesis de Oliver Curry en la que se muestra que, bajo la
etiqueta de la llamada falacia naturalista, caben al menos ocho significados
diferentes, ninguno de los cuales afectaría a la puesta al día de la ética de
Hume a la luz de la teoría de la evolución de Darwin. Esta puesta al día
adquiere la forma de una meta-ética encaminada a establecer la naturaleza y el
estatus ontológico de los valores morales. Para ello es imprescindible asumir
las aportaciones más recientes de la genética, la neurociencia, la psicología
evolutiva, la etología, la lingüística o la teoría de juegos bajo la sombra
permanente y polémica de la sociobiología y, por lo tanto, habrá que situarse
de lleno en el debate acerca de la relación naturaleza-cultura. El artículo
trata de sugerir, al menos, que esta cuestión esta contaminada desde el
principio por prejuicios históricos, religiosos e ideológicos que condicionan
el debate y que lo llevan en no pocas ocasiones a presuponer victimas y verdugos donde no debería de haber más que
un ejercicio de honestidad intelectual.
Estimado Pepe, tu propuesta es encomiable, tanto en su crítica del "dogma ambientalista" como en la formulación de las líneas generales a partir de las cuales establecer la relación entre ciertas estructuras "innatas" fruto de la evolución y aquellos aspectos de la conducta humana cuya fundamentació trascendente (Dios o la Sociedad) despreciaba como irrelevantes las aportaciones de la ciencia, en general, y la teoría de la evolución, en particular. El "uso público" había establecido, de un modo simplista y reduccionista, que lo progresista era el ambientalismo y lo retrógado y conservador "la sociobiología".
ResponderEliminarUn saludo. Paco Fernández.
PD
La letra negra sobre fondo blanco es más apropiada para gente como yo: miope de toda la vida, con incipiente presbicia e insomnio crónico.